El ser humano no es un ser perfecto, el ser humano comete
muchos errores, demasiado errores. El ser humano es egoísta, avaricioso, hipócrita
y una interminable lista de defectos. Pero el hombre no son sólo defectos, sino
también virtudes. El ser humano puede llegar a ser increíblemente bondadoso,
agradecido, caritativo, creativo y así hasta completar otra interminable lista de cosas buenas. Es como todo en esta
vida, todo tiene un lado blanco y un lado negro, hay quien dice que todo es
negro, hay quien dice que todo es blanco, y también hay quien dice que las
cosas pueden ser grises.
Pero lo que está claro es que el ser humano es un ser que
necesita vivir en sociedad, en compañía. Dudo mucho que alguien pueda llegar
a vivir en soledad, acabaría por volverse loco. El ser humano necesita del
apoyo de los demás, del cariño y del afecto y bueno...también de las críticas,
no esas que sólo pretender ridiculizarnos o dañarnos, sino aquellas que
realmente son constructivas y nos permiten aprender de nuestros errores y
crecer como personas...cómo la nota que nos pone un profesor a final de curso,
aunque creo que si toda nuestra vida tuviera que ser medida o calificada con
una nota sería algo simple y llanamente ridículo.
La inteligencia del ser humano sobrepasa fronteras, hemos
sido capaces de desarrollar una tecnología tan espectacular que hoy en día
podemos cruzar el océano atlántico en tan solo unas cuantas horas, o tener una
videoconferencia con alguien que se encuentra en la otra punta del mundo
mediante nuestro ordenador o incluso nuestro teléfono. Hemos crecido a pasos
agigantado. Tal es el desarrollo, que me atrevería a decir que la evolución tecnológica
ha conseguido ir a pasos más agigantados que la propia evolución natural.
Nuestro desarrollo tecnológico es simplemente increíble, hemos conseguido
sobrepasar barreras en las comunicaciones, en la información, en los
transportes, en las energía, en la electrónica, y hemos creado un mundo en el
que todo, absolutamente todo, esta cada día más interconectado y globalizado
gracias a herramientas como las redes sociales e internet. Hemos unido más a
las personas y hemos conseguido muchos progresos. Pero hemos cometido muchos
errores. Hemos avanzado mucho gracias a la tecnología pero nos hemos olvidado
de algo muy importante y esencial para la vida. Nos hemos olvidado de nuestro
planeta.
¿Ha oído últimamente en la televisión que hablan sobre el cambio climático? ¿sobre todas las especies que desaparecen cada día? ¿o sobre la situación de los polos, que siguen derritiéndose a un ritmo escalofriante?
Actualmente oímos por todos los medios de comunicación la palabra crisis, el ser humano a entrado en una crisis mundial económica, según dicen, pero personalmente creo que no se trata simplemente de una "crisis económica", sino que se trata de una "crisis del hombre" consigo mismo. El progreso nos ha cegado, y hemos dejado a un lado los valores, la ética y la moral, nos a podido la avaricia por el dinero. Cuando una mínima parte de la población decide apoderarse de una cantidad importante del dinero que hay en el planeta para saldar sus deudas, el resto de la población tiene que "apretarse los dientes" y trabajar más para pagar las deudas que tan sólo unos poco han creado. El hombre de hoy en día sólo se interesa por él, por su dinero, por su casa, por su familia. Pero...¿qué pasa con el resto del mundo?. Aunque a veces pensemos que no tenemos nada que ver los unos con los otros, todos somos hermanos, provenimos del mismo lugar, del mismo planeta y somos una gran familia.
Actualmente oímos por todos los medios de comunicación la palabra crisis, el ser humano a entrado en una crisis mundial económica, según dicen, pero personalmente creo que no se trata simplemente de una "crisis económica", sino que se trata de una "crisis del hombre" consigo mismo. El progreso nos ha cegado, y hemos dejado a un lado los valores, la ética y la moral, nos a podido la avaricia por el dinero. Cuando una mínima parte de la población decide apoderarse de una cantidad importante del dinero que hay en el planeta para saldar sus deudas, el resto de la población tiene que "apretarse los dientes" y trabajar más para pagar las deudas que tan sólo unos poco han creado. El hombre de hoy en día sólo se interesa por él, por su dinero, por su casa, por su familia. Pero...¿qué pasa con el resto del mundo?. Aunque a veces pensemos que no tenemos nada que ver los unos con los otros, todos somos hermanos, provenimos del mismo lugar, del mismo planeta y somos una gran familia.
Lo que hagamos aquí y hoy afectará al mañana, afectará a
nuestros hijos, a nuestros nietos, nuestros amigos y familia. No podemos
olvidarnos de que el planeta que tenemos es sólo uno, y no tiene reemplazo, ni
tampoco podemos olvidarnos de que somos una gran familia y que debemos de tomar
en cuenta a toda la población, no sólo a unos pocos privilegiados que se creen
los dueños del mundo y encima están acabando con él.
Cuando los medios se interesan en una cosa, la" crisis",
el resto de cosas se olvidan como si se las hubiera llevado el viento. Se han
olvidado de los 2 millones y medio de niños que sufren desnutrición y necesitan
ayuda en el cuerno de África, se han olvidado de que los polos siguen derritiéndose,
y de que a pesar de los avances producidos en materia de reciclado, energías
renovables etc. el cambio climático es un hecho que sigue estando a la orden
del día aunque ya nadie hable de él.